Frente de Maqueda. Artillería nacional haciendo fuego contra la localidad. Esta imagen fue portada del ABC sevillano en fecha 30 de septiembre de 1936. Foto Serrano. |
LA BATALLA DEL CASAR DE ESCALONA. -
Hasta el día 12 de septiembre de 1936 no comenzó a llegar a El Casar de
Escalona el fuerte contingente de milicias republicanas, superior a 5.000
efectivos, que acamparon en la iglesia y proximidades. Entre este ejército se
encontraba el batallón Pasionaria de Madrid y varias columnas de Guardias de
Asalto que hicieron noche en Santa Olalla. Con ellos Rafael Alberti y Dolores
Ibárruri, que arengó a las tropas en la plazuela de la Fuente. También se pudo
ver por allí, fotografiado con el poeta gaditano, al corresponsal de guerra
ruso del periódico Estrella Roja,
Ilya Eherenburg. Después de unas horas de descanso, instalaron sus
ametralladoras y demás armamento en los puntos estratégicos de El Casar de
Escalona, mirando a Talavera, aguardando al enemigo que aparecería por esa zona
oeste.
El adversario se
presentó por el lugar esperado el día 15 de septiembre, librándose una
encarnizada batalla que causó muchas bajas en ambos bandos. No tardaría el
pueblo casareño en quedar en manos nacionales, mientras las tropas republicanas
retrocedían por sus calles y en cuya retirada se produjeron escaramuzas cuerpo
a cuerpo y cargas con bayoneta. El Tábor de Regulares llegó con ansias de
vengar a sus caídos hermanos de raza y decenas de milicianos quedaron aislados
en la iglesia. Después de prender fuego a la única escalera de madera por la
que se accedía a lo más alto de la torre, se sucedió un intenso tiroteo. La gran mayoría de republicanos
asediados en el templo optaron por el suicidio arrojándose desde lo más alto;
otros siguieron disparando hasta morir acribillados o quemados. Mientras, los
atónitos vecinos permanecían escondidos en sus casas. No obstante para algunos
de éstos paisanos también habría represalia.
En efecto, momentos después los moros
hicieron valer su fama de sanguinarios y la emprendieron contra el vecindario.
Sin distinción de ideología política, comenzaron a llamar a los domicilios de
manera indiscriminada. Muchos de los que abrieron la puerta eran pasados por
las armas hasta alcanzar la lista de 11 muertos. Ese fatídico 15 de septiembre, también fallecieron, ajenos a la masacre citada, otros tres vecinos:
Timoteo García Medina, Felipe Fernández Dulce y Policarpo Murcia Escobar.
Perdieron su vida en combate o víctimas del fuego cruzado que les sorprendió a
la salida de sus domicilios. La entrada de las tropas moras de la Columna
Castejón en El Casar de Escalona fue despiadada y sangrienta.
El
Ejército Republicano, tras la ofensiva citada, retrocedió hasta el paraje
denominado Los Lugares, próximo a la vecina Santa Olalla, donde se alojaban sus
mandos militares, ignorantes estos de que El Casar había sido abandonada
inesperadamente por los nacionales. En efecto, el comandante nacional Antonio
Castejón cedió las posiciones ganadas, tal vez temeroso de un contraataque
enemigo o quizá porque todavía no consideraba la población tomada como un lugar
seguro.
Los republicanos derrotados fueron advertidos
por el casareño Amador Segovia de la retirada nacional y, a la vista del
inesperado retroceso, el día 16 septiembre se retomó la plaza. El capitán
Cabrera, perteneciente al ejército leal, llegó a caballo hasta dicha localidad.
El regreso del citado oficial a El Casar fue aterrador. A su entrada, ya
recogidos y trasladados al cementerio decenas de cadáveres, el enojado oficial
se encontró con gran cantidad de crespones blancos que adornaban los balcones
de la localidad en signo de gratitud a los militares nacionales. No obstante,
los pocos vecinos que no habían huido continuaban temerosos ante los insultos
del mando republicano que les amenazaba con estas palabras: “En este pueblo son
todos fascistas”.
Las tropas nacionales tuvieron que esperar
refuerzos y el 17 de septiembre se tomó definitivamente el pueblo. En el diario
de operaciones del ejército nacional, se reflejó la ocupación de El Casar de
Escalona "con 538 rojos muertos".
___________
COLLADO JIMÉNEZ, Juan Carlos: La Guerra Civil en El Casar de Escalona, Madrid, Azacares, 2008.
___________
COLLADO JIMÉNEZ, Juan Carlos: La Guerra Civil en El Casar de Escalona, Madrid, Azacares, 2008.